Universo David Lynch ~ Ver tema

Peliculero Registrado: 28 Nov 2006 Mensajes: 136 Pais: Ubicación: Rabbits Room

Bueno pues mis ultimas 2 visitas al cine han sido buenas y acertadas.

En este caso, La fuente de la vida, la ultima peli de Darren Aronofsky (Pi, Requiem por un sueño), es un film precioso, y diferente a sus anteriores trabajos, de Aronofsky hay que decir que las 3 peliculas que ha hecho son muy diferentes, y muy buenas ^^
Yo de esta peli destacaría la belleza visual de muchisimas escenas, y la tremenda banda sonora del bueno de Clint Mansell.
Hugh Jackman y Rache Weisz están bastante bien en sus papeles.
En fin, un soplo de aire fresco en los dias que corren, y es que, como dijo Gasset Dubois hace algún tiempo: "para ir al cine con esta cartelera, hay que tener un coeficiente mental negativo". jeje.

No puedo hacer otra cosa mas que recomendarla, no deja indiferente. Sigue así Aronofsky Smile

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"De nada estamos más lejos que de nosotros mismos"

Peliculero Registrado: 26 Feb 2007 Mensajes: 116 Pais:

Es curioso lo que ha pasado con esta película: los críticos profesionales la han masacrado sin piedad (y sin rubor, añadiría), ya la blogsfera parece haberla elevado al rango de obra maestra. Para mí, ni una cosa ni otra: me parece una buena película, de visionado muy recomendable, pero de imagen blanda y un director, Aronofsky, con cierto talento, pero que no puede ser comparado con los grandes. Lúcida y refrescante, pero no alcanza sus pretensiones. Lo mejor, la banda sonora, excelente.

Cinéfilo Registrado: 17 Nov 2006 Mensajes: 224 Pais:

Tengo ganas de verla, a ver si me puedo pasar por el cine.
Clint Mansell por lo que veo, sigue siendo muy bueno. Very Happy

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"Silencio... No hay banda... Todo es una ilusión"

He oido cosas muy buenas sobre ella, quiero ir a verla en cuanto pueda. De momento este finde veré Spiderman 3.
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"Me dijeron que era estéril y pensé que no me podía bañar, después ya me lo explicaron..."
Andy Brennan

Cinéfilo Registrado: 16 Nov 2006 Mensajes: 390 Pais: Ubicación: Oviedo

A Valladolid nos ha llegado de milagro, sólo a un cine: el mismo que nos trajo INLAND EMPIRE (y además la proyectan en la misma sala).

Llevaba un año esperándola, por críticas de Venecia como ésta. Las dos frases que me obligaron irremediablemente a desear verla: "El presunto genio Aronofsky espanta a Venecia con un engendro místico." "[...]es casi más imperdonable cubrir de ridículo a quien es la imagen del entrañable Lobezno, el actor Hugh Jackman, rapándole al cero y obligándole a interpretar a un payaso en pijama que hace yoga dentro de una bola de cristal con la impagable compañía de un bonsai con pelo."
Y una vez vista, me compadezco de la nula sensibilidad del pobre crítico, porque hay que ser superficial u obtuso para ver eso en las imágenes de La fuente. Y mira que yo iba dispuesto a partirme de risa señalando a Aronofsky.

Esperaba encontrarme una locura de hora y media; un discurrir paranoico de imágenes sin sentido aparente; un mensaje espeso; una especie de El año pasado en Marienbad pero, en lugar de pasillos en blanco y negro, coloristas imágenes psicodélicas que ni Blueberry; un surrealismo místico al borde del rídiculo; una de esas obras que te encantará si conectas con ella, y te parecerá peor que mala si no conectas.

Encontré una película fácil de seguir y de entender (en el sentido en el que la gente suele querer entender una película), y sin embargo nada convencional, y en cierta manera abierta y ambigua; una historia seria, tratada como tal e interpretada como tal (el mejor Hugh Jackman que yo recuerde); una belleza visual cautivadora y una música a la altura; un ejercicio de creatividad tristemente poco común; una de esas obras que te encantará si conectas con ella, y te parecerá peor que mala si no conectas.

Pocas producciones del 2006 me han dejado mejor sabor de boca.
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Gordon Cole en
Filmaffinity

Lynchiano Registrado: 06 Mar 2007 Mensajes: 728 Pais: Ubicación: Valladolid

He necesitado una semana y unos cuantos días para poder asimilar un poco lo que esta pequeña película propone.
Sigo a Darren Aronofsky desde sus inicios. ''Pi'' fue fascinante, ''Requiem for a dream'' fue apocalíptica y ''The Fountain'' ha sido trascendental. Sí hay dos producciones realmente interesantes en el 2006, en cuanto a experimentación de las formas se refiere, son sin duda esta película e ''Inland Empire''.

La película que nos ocupa este espacio sólo se ha estrenado en un cine, el mismo que nos trajo ''Inland Empire'' a Valladolid, como muy bien ha tenido en señalar mi vecino pucelano y forero Gordon Cole.

Yo no contaba ya con esta película. Pense que se habría perdido en los festivales y que solo su posterior edición digital me permitiría quizás disfrutar de ella. Pero afortunadamenete no ha sido así. La masacre de la crítica no sólo hizo más que aumentar mis ganas por devorar un pase en la sala oscura de la película. El resultado ha merecido la pena. Me llamó la atención que nada más comenzar la película se presentaran las intros de la 20th Century fox y la de Warner Bros. Esto me hizo sospechar justo antes de empezar la película que este film no tuvo la confianza de dos de los grandes estudios y distribuidores. La advertencia de su duración standard de 1h. y 30min. me hizo pensar en presión al señor Aronofsky y en recortes de metraje. No lo sé, el tiempo lo dirá, pero pocas veces se tiene la sensación al ver un film de la seguridad que trasmite y de la mano suave pero recia que lleva la batuta de esta impresionante producción.

Los primeros acordes de Clint Mansell invitan a un estado de sedación en la butaca. Pocas veces me he sentido tan tranquilo viendo una película y su fotografía barrocomanierista es un torrente de tranquilidad, pese a la complejidad del encuadre. Estas sensaciones me remitieron por hablar de intertextualidad en el cine a ''2046'' de Wong Kar Wai, pero esto es ya algo subjetivo.

''La fuente de la vida'' merece ser vista. Es un regalo impagable a los amantes del Séptimo arte. Pocas cosas tan preciosas, emocionantes y emotivas nos llegan de los grandes estudios norteamericanos. La película es en apariencia de lo más sencillo, pero oculta un fondo inabarcable en el que se pierde nuestra mente. Los secretos del amor, de la vida y de la muerte a través del tiempo y el espacio. Politeísta y arriesgada, tierna y porqué no decirlo, acojonante. Si señor, así se nos cuenta este metarrelato que bien podría salir de la mente de K. Dick y otros tantos visionarios de la literatura fantástica y de la ciencia ficción.

A mi me ha encantado, la interpretacion de Hugh Jackman es hasta el momento el papel de su vida, y Rachel Weisz enamora al espectador con una puesta en escena sobria pero certera.

Hay películas que en un principio no calan en el colectivo, pero que quedan muy arraigadas en la mente de la gente, yo creo que esta es una de ellas como lo fueron en su momento ''Blade Runner'' o ''el club de la lucha'' menospreciadas en general pero ahora iconos intocables de la sociedad posmoderna.

''La fuente de la vida'' es una película imprescindible. Aún podéis disfrutarla. Estáis a tiempo.

Un saludo, Cut!!!, ventanilla!!!, a positivar...

Peliculero Registrado: 26 Feb 2007 Mensajes: 116 Pais:

Lynchiano Registrado: 06 Mar 2007 Mensajes: 728 Pais: Ubicación: Valladolid

No sé si será mucho decir, pero tengo la sensación de que esta película trata el tema del amor, la vida y la muerte como no se hacía desde ''Blade Runner''.

Tengo sus potentes imágenes y su discurso en la cabeza y no se me van.

Saludos!!!, Cut!!!, ventanilla, a positivar...

Lynchiano Registrado: 06 Mar 2007 Mensajes: 728 Pais: Ubicación: Valladolid

Desde luego la canción ''Space Oddity'' de David Bowie tiene mucho que ver con el argumento de ''La fuente de la vida''. Aquí os dejo la letra para que podais leerla. Por cierto no dejeis de leer la entrevista a Darren Aronofsky de la revista ''Dirigido por...'' (abril Nº 366), en la que habla de este y otros aspectos de la realización del film.
Aquí va la letra. Recomiendo escucharla a la vez que se lee.

David Bowie Space Oddity Lyrics
Ground Control to Major Tom
Ground Control to Major Tom
Take your protein pills and put your helmet on

Ground Control to Major Tom
Commencing countdown, engines on
Check ignition and may God's love be with you

(spoken)
Ten, Nine, Eight, Seven, Six, Five, Four, Three, Two, One, Liftoff

This is Ground Control to Major Tom
You've really made the grade
And the papers want to know whose shirts you wear
Now it's time to leave the capsule if you dare

"This is Major Tom to Ground Control
I'm stepping through the door
And I'm floating in a most peculiar way
And the stars look very different today

For here
Am I sitting in a tin can

Far above the world
Planet Earth is blue
And there's nothing I can do

Though I'm past one hundred thousand miles
I'm feeling very still
And I think my spaceship knows which way to go
Tell my wife I love her very much she knows"

Ground Control to Major Tom
Your circuit's dead, there's something wrong
Can you hear me, Major Tom?
Can you hear me, Major Tom?
Can you hear me, Major Tom?
Can you....

"Here am I floating round my tin can
Far above the Moon
Planet Earth is blue
And there's nothing I can do."

Saludos Very Happy

, Cut!!!, ventanilla, a positivar...

Esta es la crítica que hice de esta preciosidad cuando la vi, por si alguno quisiera leerla:
¡Ojo, tiene spoilers!

La vida eterna queda desligada del tiempo, huye de su significado y florece dentro de una nebulosa moribunda. La muerte es un acto de creación, y el sentido mismo de la vida no reside en el tiempo que pasamos viviendo, sino en el tiempo que realmente destinamos a ser felices y no buscando esa felicidad. Por eso esta ''Fuente de la Vida'' de Aronofsky no nos habla de ser inmortales, o sí lo hace, pero para corroborar su sentido opuesto o diferenciado de esa utopía, de esa ciencia-ficción. ''The Fountain'' no es opulenta ni pretenciosa como así nos lo querían hacer ver, pues es todo lo pretenciosa que pudiera ser una historia de amor entre un hombre y una mujer. No obstante, tampoco se trata de una historia cualquiera, sino aquella que muestra la verdadera esencia de lo que significa el amor, que nos enfrenta directamente al problema del tiempo con el que contamos y de nuestro error existencial de no saber qué hacer con ese tiempo. Nos habla de un doctor enamorado de una chica que es un ángel en la Tierra, una chica con un tumor mortal cuyo marido pasa más tiempo en el laboratorio intentando encontrar una cura a su enfermedad que viviendo con ella sus últimos días. La cruel metáfora de la vida, un espejo roto en el que vemos reflejado cómo se nos escapa el tiempo sin que hagamos nada más con él que intentar alargarlo y ensancharlo. Por eso Aronofski nos dice que la vida eterna no consiste en tener más tiempo, sino en elegir la opción correcta, salir corriendo detrás de esa preciosa mujer hacia el campo nevado y no hacia las probetas y los monos de laboratorio. La vida es un libro inconcluso donde relatamos en tinta negra la odisea de una búsqueda, tinta negra con la que nos tatuamos la idea de un compromiso eterno que se extravió por el camino, señal inequívoca de que no hacíamos lo que realmente deseábamos. Las imágenes de esta obra maestra son tan poderosas, (en su concepción tanto como en su abstracción, en su plano estético y filosófico, o como simple canto a la vida) que volvemos a estar delante de un ser con vida propia que hace suyo el milagro del cine: transmitir a otro nivel por encima del lenguaje, clavarse como un dardo en el hipotálamo y extenderse como un dulce veneno a través del alma. Un alma que vive en una urna de cristal líquido viajando a cientos de miles de kilómetros por hora surcando el universo hacia Xibalba, donde el árbol de la vida volverá a renacer, o donde por fin comprenderemos que ''juntos para siempre'' no es sólo una abstracción brotada de la boca de un corazón enamorado, pues su significado trasciende la esencia mortal de la carne, trasciende el alimento de la madera de la vida, el vello erizado al contacto de unos labios amantes, o la conquista de la Nueva España en busca de una utopía que no está más allá que dentro de nosotros mismos. Darren se consagra con su tercera película y parte como uno de los grandes favoritos para hacerse con el trono que dejó Kubrick y que hoy en día sólo tiene el honor de sustentar Lynch. Cuesta reconocer su estilo en un principio, pero al cabo nos damos cuenta de que había estado todo el tiempo allí, encerrado entre líneas: volvemos a las escenas repetitivas y recurrentes (el trozo de madera en la boca mientras come del árbol de la vida, la escena de Izzi y el doctor cuando ella le pide que salgan juntos a ver la primera nevada, su figura traviesa huyendo envuelta en un vaporoso vestido rojo...), los planos cenitales y esa atmósfera trascedental, pero sobre todo esa música electrónica que no nos abandona en casi ninguna escena, ese camaleón sonoro que inunda la acción y se hace parte indisoluble de una trama que va más ligada al espíritu de quien la contempla que al frío (y absolutamente desacertado y erróneo) análisis de una sinopsis que no le hace justicia en lo más mínimo. Si bien es cierto que en esta cinta desacelera el ritmo como consecuencia inmediata del tono argumental y su fondo temático, no deja nunca de ser él mismo, recurriendo a sus preciados efectos sonoros (que son aquí los chillidos de la jungla sudamericana, la suave voz femenina susurrando 'finish it' o 'stay with me', las pisadas sobre el barro que circunda la presencia arbórea de una vida marchitándose ante un corazón en pena, perdido y confuso, que no sabe todavía qué es lo que hizo mal), convirtiendo una apuesta difícil y arriesgada en una impagable obra maestra contemporánea, lejos de una pretensión y de una magalomanía de la que habría sido imposible escapar si hubiera caído en otras manos. Gracias a Dios, las buenas historias casi siempre son contadas por los grandes genios, y sin duda Aronofsky es un genio que dirige a la perfección una película sin igual, distinta a todo cuanto habíamos visto antes, y que sin duda se trata de la mejor del año (porque INLAND EMPIRE es otra cosa, no es sólo una película) y una de las más bonitas fábulas humanas y trascendentales de todos los tiempos. Mención aparte merecen las interpretaciones de unos actores que hasta hoy yo no tenía en demasiada consideración: Rachel Weisz, la mujer del director, es casi un ángel, un ser delicado que nos enamora de inmediato, al que admiramos por su entereza y su capacidad de haber comprendido algo que para los demás queda oculto tras el dolor, la rabia y la confusión; Hugh Jackman es mucho más de lo que esperábamos, quizá el actor adecuado para la historia adecuada, algo que sin duda hace bueno que Brad Pitt se cayera de la lista; y por último Ellen Burstyn, como un homenaje silencioso pero evidente al mejor papel que le hayan brindado a Aronofsky en toda su vida como realizador (véase su anterior obra). Todo estructurado en torno a unos efectos visuales maravillosos, que eluden la rimbombancia y se centran en la elegancia de la composición de unos cuadros verdaderamente bellos, haciendo de la fotografía de la cinta motivo más que suficiente para ir a verla, por encima de su significado, que por otra parte sólo podrá defraudar a aquellos que no sepan bien donde tienen el corazón. Porque ''The Fountain'' es una fábula empírica, un experimento del sentir humano, un cuento de hadas desde el otro lado de la imaginación, que nos sugiere que la vida nace de la muerte, es naturaleza, florece y se marchita, pero a su vez el alma levita por encima de las ramas retorcidas y suplicantes, acepta que la eternidad parte de la comprensión de que nuestro sitio no está sólo aquí, que la vida eterna es compromiso, y ese compromiso es un anillo que nunca debemos quitarnos bajo ninguna circunstancia, pues es el amor y el recuerdo, la plenitud de cada momento que hemos vivido entre esa naturaleza verde y exuberante, entre la pureza de una nieve que cae en delicados copos sobre lo que más amamos en vida, que hará de la muerte un mero trámite con el que completaremos un círculo infinito. Muerte, vida, creación, amor, destino y compromiso. Para siempre.